La Cámara de Senadores bonaerense llevó adelante una sesión especial, a días de cumplirse el 48° aniversario del Golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 y en conmemoración del Día Nacional por la Memoria por la Verdad y la Justicia.
La primera en tomar la palabra fue la senadora Laura Clark, quien repudió el trágico atentado sufrido por una militante de la Agrupación Hijos, quien fue atada, golpeada, abusada sexualmente y amenazada de muerte por sus captores.
“Hoy más que nunca es nuestro deber defender con compromiso, con creatividad y vocación política la lucha de nuestras Abuelas y nuestras Madres”, indicó en su alocución.
Posteriormente, la senadora Eugenia Gil consideró que el 24 de marzo se conmemora una de las etapas “más trágicas y oscuras que vivió nuestra historia, donde el terror se instaló a través de la desaparición, la persecución, el exilio y la muerte”.
Durante su discurso, reivindicó el proceso del Nunca Más gestado durante el gobierno del ex presidente Raúl Alfonsín y propuso avanzar en un Nunca Más sobre los principales problemas que aquejan al país, a través de un gran acuerdo político.
A su turno, la senadora Amira Curi señaló que la dictadura militar tuvo como principal objetivo la reconfiguración de la matriz económica del país.
“Vinieron a poner en marcha un plan de miseria planificada, y este 24 de marzo no es un aniversario más. Es una de esas fechas que nos convoca a reflexionar sobre la Argentina de hoy, la que queremos a futuro y lo que queremos construir”, explicó.
En esa línea, propuso debatir seriamente la presencia de los discursos de odio y la reivindicación de la eliminación física del adversario político, ejemplificado en el intento de magnicidio a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
A su turno, la senadora María Rosa Martínez sostuvo que el terror infligido por la dictadura cívico militar fue un instrumento disciplinador. "Hoy la consigna de la marcha del 24 de marzo sigue siendo Nunca Más miseria planificada. El objetivo real del golpe fue transformar el modelo económico productivo en un modelo de financiarización económica. Ese proyecto de destrucción genocida encontró resistencia en nuestro pueblo”, dijo.
El senador Marcelo Leguizamón Brown fue otro de los oradores de la sesión especial, y planteó que los derechos humanos no deben tener grietas, porque pertenecen a todos los habitantes de Argentina. "No tengo dudas que fueron 30 mil, y así haya sido uno solo era una catástrofe para Argentina. Pero no podemos estar en el año 2024 todavía discutiendo cifras”, aseveró.
Por último, la senadora Teresa García reforzó la idea de que el Terrorismo de Estado tuvo como objetivo la imposición de un modelo económico.
“En ese momento el país estaba en el fifty - fifty entre el capital y el trabajo, con una elección convocada, y así y todo empezaron a rugir los vientos de un golpe de Estado. Lo que no imaginamos es que iba a tener la ferocidad que tuvo”, planteó.
También advirtió sobre algunos discursos y acciones del gobierno nacional que atentan contra las políticas de memoria, verdad y justicia. "El pueblo argentino no les va a perdonar que nieguen la lucha de 48 años de Madres, Abuelas e Hijos, porque acá hubo un golpe militar porque había una intencionalidad económica y tengo temor de que pueda pasar lo mismo”, concluyó.
Con las respectivas sesiones especiales realizadas, tanto la Cámara de Senadores como la de Diputados dieron cumplimiento a la Ley 12.654 sancionada el 24 de marzo de 2001, con el objetivo de reafirmar la democracia y los derechos humanos y repudiar al terrorismo de estado y de toda forma de discriminación desfavorable por cualquier motivo.